Las principales características de la Estimulación Temprana serían:
– Hacer florecer las capacidades de cada niño o niña para conseguir un desarrollo integral y adecuado, respetando sus ritmos de maduración.
– Procurar diversidad de situaciones y experiencias que cubran sus necesidades e inquietudes, lo que le permitirá adquirir conocimientos, habilidades y destrezas para adaptarse a la vida y a las distintas situaciones que se vayan presentando.
– Prevenir posibles carencias o dificultades que puedan influir de forma negativa en el desarrollo del niño
– Detectar de forma precoz riesgos de deficiencias que puedan limitar la correcta maduración de cada niño o niña
– Ofrecer un programa de intervención que tienda a conseguir el máximo desarrollo físico, mental y social del niño
