La psicomotricidad fina es una secuencia de movimientos coordinados que se realizan con diversas partes del cuerpo.
A medida que un bebé va creciendo, éste va adquiriendo de manera natural las destrezas de psicomotricidad fina.
Sólo si la maduración del sistema nervioso madura de la forma correcta, un niño podrá llegar a:
- Recortar en distintas direcciones con las tijeras
- Dibujar líneas o círculos
- Doblar un papel o ropa
- Agarrar de forma eficiente un lápiz y escribir con el tono adecuado
- Jugar a piezas que encajen
- Jugar con bloques, tipo Lego
- Rasgar papel
- Coger y utilizar de forma precisa unas pinzas de depilar
- Abrir y cerrar una cremallera
- Lanzar un objeto
- Hacer un círculo para marcar la respuesta de un examen
- Montar un puzle
- Abrochar y desabrochar botones
- Juegos de hilar y coser
- Modelar con plastilina
- …
